Cuando el invierno envuelve Europa en un manto de nieve y luces, los mercadillos navideños transforman las ciudades en escenarios mágicos.
Estos encantadores mercados no solo son el lugar perfecto para encontrar regalos únicos y deleitarse con especialidades locales, sino también para vivir el verdadero espíritu de la Navidad en un ambiente acogedor y festivo.
A continuación, te explicamos los detalles de la ruta que estamos recorriendo estos días.
Nuestro viaje incluye los principales destinos de Perú, desde la costa hasta los Andes, con un final en el místico Valle Sagrado.
Budapest, Hungría
En la Plaza Vörösmarty, el mercadillo navideño de Budapest brilla con su autenticidad y tradición. Aquí se pueden encontrar artesanías locales, como decoraciones de madera y cerámica pintada, mientras se disfruta de un delicioso lángos o un cálido vino especiado. Las luces que iluminan el Parlamento y el Puente de las Cadenas hacen que la experiencia sea simplemente inolvidable.
Salzburgo, Austria
La ciudad natal de Mozart ofrece uno de los mercadillos navideños más pintorescos de Europa, situado junto a la catedral barroca. En Salzburgo, los aromas de galletas especiadas y ponches calientes se mezclan con los sonidos de coros navideños. La atmósfera romántica y el entorno alpino la convierten en un destino soñado para la temporada.
Berlín, Alemania
Con más de 70 mercadillos por toda la ciudad, Berlín ofrece una experiencia navideña para todos los gustos. El Mercadillo de Gendarmenmarkt destaca por su elegancia, rodeado de arquitectura clásica. Es ideal para degustar salchichas alemanas y comprar exquisitas decoraciones hechas a mano.
Tallin, Estonia
Con su encanto medieval, Tallin es un verdadero cuento de hadas navideño. En la Plaza del Ayuntamiento, el mercadillo ofrece artesanías locales, tejidos de lana y delicias como las salchichas ahumadas y el pan de jengibre. Las casitas de madera y las nevadas frecuentes crean un ambiente mágico.
Innsbruck, Austria
Rodeado por los Alpes, el mercadillo navideño de Innsbruck es un escenario digno de postal. Situado junto al Tejadillo Dorado, este mercado combina tradición y vistas espectaculares. No te pierdas el kaiserschmarrn, un postre dulce perfecto para la ocasión.
Basilea, Suiza
Considerado uno de los mejores de Suiza, el mercadillo de Basilea se extiende por la Barfüsserplatz y la Münsterplatz. Las casetas de madera decoradas con esmero ofrecen desde chocolates suizos hasta adornos de cristal hechos a mano. La atmósfera acogedora y el arte local hacen de Basilea una visita imprescindible durante las fiestas.
Colmar, Francia
En el corazón de Alsacia, Colmar ofrece una experiencia navideña de ensueño con sus calles adoquinadas y fachadas medievales iluminadas. Los mercadillos se distribuyen en varios puntos del casco antiguo, cada uno con su propia temática. El vino caliente y las especialidades alsacianas, como el foie gras, son imprescindibles.
Europa en Navidad es un sueño hecho realidad, y cada uno de estos destinos ofrece su propia versión de magia festiva. Si buscas una experiencia inolvidable, estos mercadillos te envolverán en el verdadero espíritu de la Navidad.
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